Detalles de la iniciativa
El objetivo principal de los organizadores de este proyecto era conocer a las personas que iban a vivir junto a ellos en la misma ciudad. Disipar el “miedo” de los austriacos locales hacia los nuevos “extraños” era importante, así como fomentar la convivencia entre ambos. Los inmigrantes deberían desarrollar una actividad que sea útil para poder cultivar sus propios alimentos saludables, ahorrando dinero a largo plazo. Debido al interés de coser y cultivar de manera conjunta, sobre todo dos mujeres comenzaron todo el proyecto, sin ningún apoyo financiero ni gubernamental. Algunos inmigrantes estaban interesados y muchas personas apoyaron la iniciativa donando semillas, plantas y herramientas ya que sentían la necesidad de contribuir con el proyecto. Pronto un espacio para cultivar fue alquilado gratuitamente al grupo por una mujer que apoyaba el proyecto. Todo el material es compartido y tratado como bienes comunes, no existen parcelas privadas. El trabajo y los rendimientos de este se comparten de manera justa entre los participantes.
Las dos mujeres que iniciaron la iniciativa y algunos voluntarios más, desarrollaron una verdadera amistad con los inmigrantes asegurándose un buen comienzo en este nuevo país. También comenzaron a impartir clases de alemán gratuitas, ayudando de manera informal con cuestiones legales, ayudándoles a encontrar alojamiento. Además, incluyeron a los inmigrantes en sesiones abiertas de costura en sus casas. Estas sesiones están abiertas para todos los interesados. Los productos reciclados y valorizados se crean de manera conjunta.
Muchas personas querían apoyar este proyecto con donaciones, útiles para el huerto, como plantas y herramientas, o útiles para coser, como telas y ropa vieja. Estaban orgullosos de donar cosas que ya no necesitan y que eran demasiado buenas para tirar. Estos artículos donados se utilizan en el huerto, en las actividades de costura o se distribuyen entre los inmigrantes. A medida que aumentó el número de donaciones, se comenzó a poner en funcionamiento el “centro de redistribución”. Debido a esto, se necesita muy poco dinero para mantener el proyecto. Intentan no comprar nada adicional y usar lo que obtienen. Tampoco hay organismos de apoyo, como el gobierno o asociaciones locales. Solo de vez en cuando se recibe algún apoyo informal (arado del área del huerto, donaciones de plantas de los agricultores, etc.).
Con la venta de textiles, los inmigrantes pueden ser recompensados indirectamente (sin pago financiero) por el tiempo y la pasión que dedican al proyecto. Ocasionalmente hay eventos en los que se exhiben y venden sus productos en mercados típicos como el mercado navideño de la ciudad. En Austria, las asociaciones sin ánimo de lucro solo pueden vender pequeñas cantidades de productos sin poder obtener beneficios a largo plazo. El dinero debe ser reinvertido en la asociación para intentar alcanzar sus objetivos. Para ello, las facturas de billetes de tren, las clases de alemán, materiales escolares y otros gastos están cubiertos con este dinero por la asociación para los inmigrantes.
Los fundadores y el inmigrante hortelano más interesado están gestionando el proyecto sin ningún tipo de jerarquía. Son responsables de la comunicación, la traducción y la planificación de los siguientes pasos, pero también están trabajando en el huerto y en la costura junto a todos los demás.
El camino al éxito según la visión de los organizadores fue:
- Trabajo meditativo sencillo, donde no es necesario talento ni lenguaje.
- Comunidad : crear un sentimiento de pertenencia.
- Esfuerzo y pasión de los voluntarios: no se necesita capacitación especial
- Énfasis en la necesidad de participar.
- Dar un toque divertido a la actividad.
Los inmigrantes están continuamente contribuyendo ya que han desarrollado un sentimiento de pertenencia a este grupo y tienen mucho tiempo libre, ya que la ley no les permite trabajar en Austria hasta que obtengan un estatus de refugiado oficial.
Lecciones aprendidas por los inmigrantes / consejos a otros inmigrantes:
- Ser curioso y estar abierto a probar estos tipos de iniciativas / posibilidades.
- Aprender el idioma local.