Introducción

The Grange es un antiguo edificio Rectoral con 10 acres de huertos, situado en un pequeño pueblo rural en West Norfolk. El proyecto comenzó como una iniciativa familiar, y se ha desarrollado a lo largo del tiempo para poder contratar a un trabajador a tiempo parcial que trabaja con un gran número de voluntarios, incluidos muchos refugiados y solicitantes de asilo, para desarrollar y mantener los huertos y espacios al aire libre. El edificio principal tiene nueve habitaciones, y durante un tiempo el proyecto ofreció principalmente ayudas residenciales. Durante este período, hasta doce grupos de solicitantes de asilo visitarían el huerto todos los años entre tres y diez días, pero debido a las restricciones para la prevención de incendios, el proyecto ahora ha comenzado a ofrecer jornadas de un solo día.

“Tenga en cuenta las sensibilidades que otras personas puedan tener, pero no permita que esto se convierta en una barrera para el compromiso, sin tratar a las personas de manera diferente solo porque son refugiadas o solicitantes de asilo. Busque puntos en común entre las personas usuarias y usted mismo en lugar de diferencias.
La supervisión mensual con un terapeuta cualificado puede ayudar a lidiar con parte de la carga emocional que puede surgir en el entorno laboral. Asegurarse de que se toman las medidas de protección adecuadas.
Si trabaja en entornos rurales, tenga en cuenta el aislamiento y cualquier problema de salud y seguridad que pueda surgir en una zona solitaria como esta.”

Localización-coordenadas:

The Grange
The Street
Great Cressingham
Norfolk
IP25 6NL

Descripción del huerto

El proyecto está ubicado en un pueblo muy pequeño en West Norfolk, y se basa en un antiguo edificio de la rectoría que originalmente fue el hogar donde se crió uno de los fundadores del proyecto, y más tarde se convirtió en el hogar de su familia. Los huertos cubren alrededor de 10 acres, con una zona de hierbas medicinales, un poli túnel, frutales, zonas forestales, grandes prados, estanques de agua y parcelas de hortalizas cultivadas en permacultura. Todo el lugar ha sido diseñado según los principios de permacultura, y también tiene espacios para el ganado, actualmente con gallinas y dos ponis Shetland. Además del edificio principal, hay varios graneros y dependencias que se han convertido en espacios de talleres de manualidades, como cerámica y confección. Existe además una zona de carpintería verde al aire libre y un horno para pizzas.

El número de visitantes varía a lo largo del año y también depende de las actividades que se realicen. Cuando The Grange pudo organizar programas residenciales, el número de refugiados y solicitantes de asilo alojados fue mucho mayor, pero sin la posibilidad de estancias hay más voluntarios locales y tan solo alrededor de cinco refugiados y solicitantes de asilo que provienen de una organización asociada con sede en Norwich atienden cada mes, como parte de su participación en el “Workday Wensday”.

El proyecto puede funcionar con un presupuesto bajo debido a la ausencia de pagos de alquiler, ya que el uso de las instalaciones está financiado por los propietarios. Los costes principales son aquellos relacionados con el personal y los gastos generales, como electricidad, agua, etc. así como artículos prácticos como herramientas, alimento para animales y refrescos.

Detalles de la iniciativa

The Grange organiza los “Workday Wednesday” regularmente, donde voluntarios locales se unen con un grupo de refugiados y solicitantes de asilo de Norwich (la ciudad más cercana) para cultivar y comer juntos. Todos los voluntarios que se presentan por primera vez deben completar un formulario de solicitud y ser evaluados por un miembro del personal. Todos los voluntarios reciben capacitación en temas relacionados con asilo y sobre cómo trabajar con solicitantes de asilo, así sobre cómo detectar los signos de trauma que pueden presentar los inmigrantes. Una parte clave dentro de la capacitación es identificar los límites para garantizar que los voluntarios no ofrezcan consejos que, aunque bien intencionados, pueden ser potencialmente dañinos.

Posibilidades y oportunidades

El proyecto también ha comenzado a ejecutar una serie de talleres y cursos de artesanía en colaboración con artesanos locales. Estos ayudan a generar ingresos para el proyecto y también aumentan la conciencia social sobre el trabajo que están haciendo.

The Grange confirma resultados terapéuticos tanto formales como informales. Un psicoterapeuta que acompañó grupos de inmigrantes a The Grange describió su paso por el huerto como un “cargador de energía” para los procesos terapéuticos. Dijo que podía lograr en una semana en The Grange lo mismo que en seis meses de terapias y sesiones grupales en Londres. Los comentarios de los miembros del grupo revelan que algunas de las razones son:
- La confianza demostrada para ser bienvenidos en un hogar familiar como este.
- El espacio y la belleza paisajística que posee The Grange y sus alrededores.
- Trabajar junto con voluntarios de la zona y sentirse valorado como parte del grupo.

Amenazas y retos

Las únicas amenazas o desafíos son tener la posibilidad de contar con un tutor adecuado y la falta de fondos para pagar las jornadas cuando no hay un tutor voluntario disponible.

Conocimientos/actitudes/habilidades/formación

El intercambio de habilidades en The Grange también tiene resultados muy beneficiosos. The Grange trabaja con artesanos locales para ofrecer acceso al arte, cerámica, telares, artesanía en madera, música y otras muchas oportunidades de aprendizaje. También identifican las habilidades que poseen tanto los solicitantes de asilo como los refugiados y buscan maneras de encajarlos en The Grange para poder compartirlo con los demás. Esta es una forma divertida de proporcionar un entorno terapéutico en el que las personas pueden recuperar la confianza en sus propias habilidades y ser parte de un ambiente de aprendizaje seguro que puede ayudarles en el futuro a encontrar espacios de aprendizaje más formales como clases de inglés, acceso a la universidad, etc.

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