Albergue Princesa Letizia

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Introducción

El Albergue Princesa Letizia es un recurso público para personas en riesgo de exclusión social ubicado en Santander.

Los huertos del ‘Princesa Letizia’ comenzaron en 2011 para promover el empleo de usuarios del centro con baja cualificación, experiencia laboral limitada y dificultades para acceder a un trabajo.

Con este programa, los beneficiarios adquieren habilidades básicas que facilitan su interacción social, habilidades laborales y conocimientos que les permiten desarrollarse.

El propósito del Princesa Letizia es doble: el objetivo principal es proporcionar alojamiento a las personas en tránsito durante un corto período de tiempo. Por otra parte ,el objetivo secundario incluye planificar itinerarios personalizados a largo plazo para personas en riesgo de exclusión social y que generalmente residen en el albergue.

“Este es un proyecto con un inicio lento, que requiere técnicos específicos y dinero que nos permita pagar los gastos básicos, pero además deben de establecerse objetivos claros y evaluables a corto y largo plazo.”
Gerente

“Estos huertos son importantes para adquirir nuevos conocimientos y optar por nuevas oportunidades de empleo.”

“Me encanta cultivar y consumir mis propios productos y participar en los nuevos proyectos que se han desarrollado en el centro.”

“Regístrate y participa en los proyectos!”
Los inmigrantes

Localización-coordenadas

Este huerto tiene dos espacios diferentes:
Avenida Candina 31. 39001 Santander.
Finca Mataleñas, Av del Faro 12, pol 11, Parc 140. 39012 Santander.

Descripción del huerto

El albergue Princesa Letizia es una organización de derecho privado que depende de la administración municipal.

El huerto urbano que se encuentra en el albergue está coordinado por la Fundación para la promoción de espacios y actividades sociales de la ciudad de Santander. El huerto es propiedad municipal, empezó su trayectoria en 2011 y cuenta con la financiación de fondos públicos.

El huerto y las actividades que se desarrollan en él forman parte de las actividades que se realizan en el centro cuya finalidad es la plena integración social y laboral de los usuarios del albergue. Tiene una superficie total de 350 m2 y se divide en 11 parcelas individuales con tamaños entre los 15 y 20 m², junto a un invernadero en la finca Mataleñas de 150 m².

Los beneficiarios de los huertos son los usuarios del centro que actualmente viven en el albergue o que han vivido allí en el pasado y son evaluados por el equipo técnico para determinar si este tipo de actividad puede ayudarlos en su integración social o ayudarlos en su dieta diaria.

El número anual de hortelanos que participan es de 32, incluyendo a 11 personas inmigrantes o solicitantes de asilo.

La producción principal se centra en hortalizas orgánicas, así como el cultivo de flores comestibles.

Los usuarios también disponen de todos los materiales necesarios para desarrollar las actividades: un invernadero, una casa de herramientas, baños, así como cocina, un comedor, un gimnasio, oficinas y una sala de ordenadores. En este momento hay dos técnicos que trabajan en agricultura orgánica, nueve trabajadores del albergue, un voluntario y dos internos.

Los técnicos en agricultura orgánica enseñan a los usuarios las diferentes técnicas que utilizarán durante todo el programa.

Por último, es importante destacar el trabajo que se realiza enfocado en la adquisición de habilidades sociales y la recuperación de otras que pueden haber sido subutilizadas o infravaloradas.

Detalles de la iniciativa

Actualmente en España, la integración social de los inmigrantes sigue siendo un tema pendiente y tiene un gran impacto en los recursos sociales del país.

El Albergue Princesa Letizia no es ajeno a esta realidad y es por eso que están tratando de desarrollar esta iniciativa de huertos urbanos para responder a esta demanda social.

El proyecto tiene como objetivo proporcionar capacitación a las personas que viven en el centro o que han participado en otros programas y están trabajando para su incorporación social.

Es importante destacar que las actividades realizadas por el albergue están abiertas a todas las personas, independientemente de su nacionalidad. Estas actividades tienen como objetivo lograr la plena integración social, al tiempo que aumentan la empleabilidad de estas personas a través del apoyo de los trabajadores del mundo de lo social, como integradores sociales y educadores.

En este huerto urbano trabajan con un compromiso expreso de los participantes para lograr que los inmigrantes sientan que el proyecto es suyo y que forma parte de su aprendizaje y desarrollo personal. Además, los huertos urbanos facilitan el conocimiento de las diferentes culturas de origen así como los intereses, las incertidumbres y las perspectivas de vida de los inmigrantes.

Es importante resaltar la idea de itinerarios personalizados para cada usuario, buscando las mejores formas de lograr el empoderamiento de estas personas, intentando proporcionar oportunidades sociales y laborales para lograr un equilibrio personal.

Posibilidades / Oportunidades

En el caso de las personas inmigrantes, gracias a estas iniciativas, se logra una mayor integración social al proporcionarles recursos y herramientas que en la mayoría de los casos no adquirieron en su propio país o que han olvidado. Se les da la oportunidad de iniciar una capacitación profesional que motive el nuevo aprendizaje. Esto estimula su desarrollo y alienta o recupera habilidades que pueden ser útiles en el proceso de reintegración social.

También se esfuerzan para lograr un ambiente multicultural con la consiguiente aceptación de todas las personas, creando un ambiente de apoyo mutuo.

El reconocimiento del otro es esencial para lograr esta deseada integración.

Amenazas / desafíos

Diariamente, el albergue se encuentra con diferentes perfiles de usuarios que varían no solo en el ámbito cultural o social, sino también en su contexto jurídico en España.

Estar en posesión de la documentación legalmente requerida por la administración española es el punto finalista para poder acceder a la educación formal.

Además, se analizan otros factores transversales que influirán en el empoderamiento de estos usuarios, siendo estos factores muy variados, ya que se pueden encontrar problemas de drogadicción, enfermedades mentales, desestructuración familiar, desempleo crónico, ruptura de relaciones interpersonales y una larga lista de otros problemas que pueden contribuir a estas situaciones tanto en personas locales como inmigrantes.

Dado el perfil de los usuarios y su vulnerabilidad, a veces puede ser difícil motivarles para que se adapten al proyecto con la finalidad de capacitarles para enfrentarse a procesos de cambio, engancharles, lograr que participen y que sean capaces de trabajar en equipo.

Consideración general

El principal factor de éxito es lograr que el grupo de participantes sienta que el proyecto es propio como parte de su aprendizaje y desarrollo personal.

El principal beneficio de trabajar con inmigrantes es el enriquecimiento multicultural y la promoción de la tolerancia. La integración total es un objetivo acordado con los propios usuarios. En muchos casos, los planes personales consensuados se siguen hasta el final, pero en otros por diferentes razones, no se finalizan, incumpliéndose el compromiso adquirido con el proyecto y , por ende, no alcanzándose los objetivos acordados.

Conocimiento/Actitudes/Habilidades/Entrenamiento

Las habilidades sociales y personales, el conocimiento técnico en agricultura y una actitud de tolerancia, aceptación y adaptación, así como la predisposición al aprendizaje y al trabajo en equipo son de suma importancia.

El equipo que trabaja dentro del huerto posee formación en agricultura ecológica y, en el caso de los técnicos del centro de acogida, formación social como técnicos e integradores.

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